El cuerpo de hamlet será comida para cuervos y nadie lo extrañará pues no hay nadie que quede para extrañarlo, su mente atrapada por siempre en su eterno laberinto de cal, vagando, sin resolución, como un perro perdido, como un cuadro de demencia atrapado en un frasco de formol dentro de un infinito azul silencio...
La cortina yace abierta, la función ha terminado, pueden irse todos a su casa, Hamlet por fin ha muerto, ya no hay más que ver aquí, la broma ha terminado.
La salida es por la izquierda, siga el letrero verde y cuidado con el escalón, no se vaya a tropezar.
P.D: Buen velada y esperemos nunca verlo de nuevo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario